domingo, 16 de noviembre de 2008

Paraíso en llamas

Mini reseñita del útimo hijito. Prometo profundidad a cada devra en futuras entregas,pues esto es más bien un comercial

Paraíso en llamas, es el primer título de la colección LAVÍBORADELAMAR, que lejos de presentar antologías, tan comunes y tan exploradas en los años recientes para la poesía joven, propone la idea de la construcción de libros colectivos y experiencias de relectura de la realidad poética en colectividad.

Paraíso en llamas reúne la poesía del colectivo devrayativa, mismo grupo de acción que surgió de manera virtual en la red, en este libro encontramos la voces frescas de ocho autores cuyas edades están entre los 17 y los 25 años, apunta Andrés Marquez en su presentación dice "en este Paraíso en llamas vamos encontrar un dossier considerable donde se encuentran las palabras para llenar la oquedad, la búsqueda de esa luz nebulosa y distante que es punto de fuga de nuestra alma. Es poesía de golpe que mueve y conmueve al lector desde lo poético, lo amoroso y lo salvífico." Ardamos en la llamas del paraíso solamente para convencernos de que la única opción de este siglo XXI es la reivindicación de la vitalidad en todas sus formas. Vivir es lo único que demostrará nuestro paso por esta última catástrofe y es ya el más alto gesto de amor.

Promesas de un domingo de lecturas

El sol se oculta bajo la ventana y un onda gélida recorre la ciudad, sintonía perfecta para en un fin de semana largo actualizarme en mis lecturas. No logro concluir todas las que tengo comprometidas, de modo que ni que hacerle, sin embargo sigue en mi pie mi propuesta de utilizar esta bitácora virtual como un espacio para subir mis modestas reseñas de lecturas así que prometo y me comprometo con las siguientes que viven a medio leer o más bien leídas y sin que aún les haya logrado asimilar para escribir, la música, de Gastón Alejandro Martínez,
Demonia Factory, de Ernesto Carrión, La risa de la medusa de Hélène Cixous,, Bagual,de Felipe Becerra Calderón, Ensayar, crear viajar de la tentativa como forma de arte, de Sigrifredo Marín, textos postautónomos para comer las nuevas ficciones, complilado por César Cortés, , Cuentráficos de Christina Rascón, Aviso a los náufragos de Paulo Lemiski, Las cosas útimas, de Mónica González, La edición independiente como arte como herramienta protágonica de la bibliodiversidad, de Gilles Colleu, Silencios, de Iván Trejo y lo que se sume esta semana, que hay ya varios en incluso en manúscrito, entonces pues ahí esta la promesa, muera esta Kitty si cumple su palabra.